Minería y valor agregado

Por Carlos Portilla*

En Neuquén se desarrolla minería de mediana y pequeña escala, tanto de los minerales metalíferos como de los denominados industriales. Existen además proyectos en actual exploración que paso a paso tienden a posicionar producciones de gran envergadura, como los de aprovechamiento de sal de potasio, cuya puesta en marcha se espera para 2016. La minería local se nutre además de múltiples procesos productivos mineros de la mano de pequeñas empresas que proveen minerales de base pétrea para distintas industrias, entre ellas la de la construcción.
Para la provincia es muy importante sostener y acompañar la producción tanto de los minerales industriales, como caliza, yeso, dolomita, arcillas y bentonitas entre otros, como así también el único proceso productivo polimetálico, ubicado en las localidades de Andacollo y Huinganco. Los empleos vinculados a la actividad, en los procesos que involucran la extracción del mineral, su transporte, industrialización y comercialización, como así también las tareas de exploración, involucran 1.850 puestos laborales directos y 5.550 indirectos. Alrededor del 75% de estos empleos son ocupados por la extracción de minerales industriales, los que predominan en la zona centro de Neuquén.
De aquí se desprende la enorme importancia que reviste la expresión “valor agregado”. Si estos minerales no se industrializaran en su mayoría localmente se perderían 2/3 de los empleos, 2/3 de consumo de energía, de insumos, combustibles, librería, repuestos, etc. A modo de ejemplo: Una tonelada de caliza extraída y puesta sobre camión en su cantera de origen alcanza un valor de $35. Si a esa misma sustancia se la muele y embolsa, entonces ese valor se dispara a $150; y si a esa tonelada de caliza se la industrializa transformándola en cal o se la introduce como parte integrante del cemento, el incremento de valor es del 1.300%.
En los rubros mano de obra y contratación de servicios, se sigue como línea de trabajo, la contratación, por parte de terceros, de servicios locales para la ejecución de las tareas exploratorias (entre otras), en tanto y en cuanto ello no grave negativamente el desarrollo de ningún proyecto; una premisa que las empresas locales y foráneas conocen perfectamente.Para asegurar la agregación de valor local y su efecto multiplicador, en enero de 2010 entró en vigencia la nueva ley de tasas que grava fuertemente el transporte de toda sustancia mineral que se comercializa sin un adecuado valor agregado, máxime si el destino de estos minerales es el exterior. La modificación fue presentada por el poder ejecutivo y aprobada por casi la unanimidad de los legisladores. Lamentablemente la legislación fue cuestionada ante el Poder Judicial y se encuentra suspendida (para un único caso).

 “Limpieza”

Como ejes de gestión se logró oficializar la tramitación de los distintos oficios que se requieren desde otras instituciones para concretar el registro de una propiedad minera y, paralelamente se aumentaron sustancialmente los controles que se realizan en el terreno. Con estas dos líneas de trabajo ya logradas, es que se produce en forma paulatina una limpieza profunda del mapa minero de la provincia. “Limpieza” significa descartar conforme a la ley aquellas propiedades que se ubicaron con la sola intención de especular con la posibilidad de realizar un “gran negocio” sin realizar las inversiones necesarias o, lo que es peor aún, impedir el desarrollo de otros proyectos productivos. Con esto, la provincia ofrece las garantías necesarias para el acrecentamiento de los proyectos productivos en marcha y para la radicación de otros nuevos.

Producción y exploración

La curva de producción es netamente ascendente en el último lustro. Durante el transcurso del año 2010, medida en valores comercializados, la actividad minera provincial se incrementó el 42% respecto de 2009. En el mismo porcentaje coincidió el crecimiento de las exportaciones. Respecto de exploración, de la mano de empresas, entre las que se ubica la Cormine SEP, se registraron en los últimos 5 años inversiones del orden de los 140 millones de pesos, encontrándose las mayores en el interés que despertó el potasio. Luego el oro, la plata y el cobre conforman el atractivo de desarrollo futuro de la minería metalífera.

Colaterales

Los controles en materia de seguridad, higiene y medio ambiente se realizan asiduamente. Un ejemplo son los realizados sobre el desarrollo productivo de mina, planta y laboratorio que se ubican en el Cerro Minas, cuya titularidad pertenece a Cormine, los que se solventan con la participación económica de una porción de las regalías que se perciben del mismo proyecto. Se tiene como premisa fundamental para todas las tareas que allí se realizan, el cuidado y la preservación del recurso hídrico.
Para todo ello se cuenta con herramientas legales apropiadas, diseñadas específicamente y con recursos humanos capacitados en cada una de las variables que involucran el desarrollo de la producción minera, tanto desde la Dirección de Policía Minera, como de la Unidad de Gestión Ambiental Provincial y de la Subsecretaría de Medio Ambiente.
En materia de proyectos, la mejor expectativa se posiciona a corto y mediano plazo, de la mano del aprovechamiento de vapores endógenos. Se trata de la producción de energía limpia, sin vertido de efluentes ni emisión de gases de ningún tipo, más el aprovechamiento de vapores naturales que en la actualidad se desaprovechan 2

(*) Director provincial de Minería.